Babymetal es la banda creadora del kawaii-metal (kawaii significa ‘adorable’ en japonés), caracterizado por la mezcla de elementos tanto del metal como del j-pop. Este mismo año ha cumplido su décimo aniversario, pero, ¿cómo ha conseguido un grupo de idols hacerse un hueco en el metal? Empecemos por sus inicios.
En Japón existe una industria de música denominada como j-pop, la cual posee algunos parecidos y diferencias con el actualmente muy conocido k-pop. La similitud principal se trata de la existencia de empresas que se dedican a generar idols, celebridades que son capaces de cantar, actuar, modelar, presentar, etc. Estas agencias realizan audiciones a jóvenes casi sin experiencia, para después entrenarles y que se conviertan así en estrellas.
En abril de 2010, la compañía de entretenimiento Amuse, Inc. creó Sakura Gakuin, un grupo que simulaba un colegio de Japón (en agosto de 2021 se desintegrará). Las integrantes tenían entre diez y quince años, se graduaban en marzo y tenían distintos clubes, los cuales constituían las sub-unidades del grupo (esto es algo común en los grupos idols con muchos integrantes). Uno de estos fue el Juonbu, ‘club de música heavy’. Este era el proyecto de un productor de la empresa fan del metal, Kei Kobayashi “Koba”, el cual estuvo pensando en crear un grupo centrado en Suzuka Nakamoto, pues consideraba que tenía una voz potente y mucha presencia en el escenario. Para contrastar, decidió añadir a dos integrantes que «bailaran a su alrededor como ángeles», estas fueron Moa Kikuchi y Yui Mizuno. Hasta ese momento, ninguna de las niñas había escuchado metal, no obstante, trabajaron en el proyecto con ilusión y dedicación, convirtiéndose en Sumetal, Moametal y Yuimetal en el escenario (asimismo Koba pasó a ser apodado Kobametal).
Así, Babymetal sacó tres canciones dentro de Sakura Gakuin, Doki Doki Morning, Ijime, Dame, Zettai y Headbanger!! Ya en 2013 Suzuka Nakamoto debía graduarse y la empresa decidió conformar la banda fuera del grupo principal para que siguiera con sus actividades. Acudieron a diversos festivales de rock y metal siendo las artistas más jóvenes en actuar en estos y en 2014 estrenaron su primer álbum, Babymetal, en el que se incluyeron los singles ya mencionados. Este fue un éxito en las listas de metal de Japón, Estados Unidos, Reino Unido y Alemania. La mezcla del metal con letras inocentes y adorables que trataban sobre querer comer chocolate (Gimme Chocolate!!), prepararse para ir al colegio (Doki Doki Morning) o jugar al escondite (Catch Me If You Can) encandiló al mundo del metal.
Aquí hay que detenerse para hablar sobre la banda que acompaña al grupo. En sus inicios eran los llamados Babybones, un grupo vestido de esqueleto que fingían tocar instrumentos; sin embargo, a partir de 2012 para los festivales acudía la Kami Band (Kami significa ‘dios’ en japonés, cada integrante es el dios del instrumento que toca). En 2014 Babybones dejó de acompañarlas. La KamiBand es una parte muy importante del grupo, pues se trata de músicos expertos que también trabajan en otros grupos de rock y metal, para muchos metaleros son la verdadera razón por la que Babymetal ha tenido éxito.
También en 2014 hicieron su primera aparición en Reino Unido en el Sonisphere Festival, muy importante en el rock y el metal. Se suponía que iban a actuar en un escenario secundario, pero a última hora se les cambió al principal, al mismo en el que Iron Maiden tocaría más tarde. Las chicas estaban nerviosas pues es usual que en este festival el público tire objetos a los artistas que no gustan, no obstante, los espectadores acabaron pidiendo más y su merchandising fue el más vendido del festival.
Con su segundo álbum, Metal Resistance (2016), se adentraron en un sonido más cohesivo. En Babymetal a veces las partes de pop y metal se encontraban algo desconectadas resultando chocante. Esto era algo que generaba un gran impacto, siendo parte de lo que les hizo populares, pero con Metal Resistance se adentraban ya en un sonido más maduro.
En 2018 el guitarrista Mikio Fujioka murió debido a un accidente en una torre de observación y Yuimetal, salió definitivamente del grupo tras ausentarse en varios conciertos por enfermedad. Estos acontecimientos inspiraron la canción Starlight, en la que se despiden del guitarrista y la cual comienza la llamada Triology of Lights, ‘triología de las luces’, en la que se incluyen Shine y Arkadia. Estas suponen el final del tercer disco Metal Galaxy (2019), en el que exploran distintos sonidos como el indio (Shanti, Shanti, Shanti) o el latino (Night Night Burn).
Las chicas han confirmado en varias ocasiones que no escriben las canciones y sólo Moametal sabe tocar un instrumento, la guitarra; además, nunca aparecen fuera de sus personajes en el escenario, es decir, siempre como Sumetal y Moametal, con los trajes incluidos, y tampoco tienen redes sociales, sólo las oficiales de Babymetal en las que se hace publicidad. Además, no se usa el gesto de los cuernos, sino el kitsune, ‘zorro’, el dios zorro es importante en el concepto de Babymetal.
Estas son características comunes en la industria del j-pop, por lo que normalmente se la categoriza como manufacturada. Por otro lado, los metaleros son fans de un estilo totalmente opuesto, no sólo musicalmente, sino también en lo que consideran música y en las cualidades que hacen de alguien un verdadero artista. Así, los fans del metal son una comunidad que puede resultar un tanto elitista, otorgando el título de música verdadera y de artista según su propio criterio.
¿Cómo pudo llegar Babymetal a una comunidad así?
La equiparación entre manufacturado y sin talento, se hace a menudo, pero es difícil realizarla con Babymetal. Para Amuse, Inc. es un producto que saben vender (el grupo rinde homenaje constante ¡mente a distintos sub-géneros y grupos de metal) y para las integrantes es un sueño hecho realidad por el que trabajan duramente, esto hace de los shows una experiencia inigualable. Eso es el j-pop: las ideas de conceptos, marketing, composición, etc. hechas para vender, más el duro trabajo y la profesionalidad de los idols. Babymetal demostró a los metaleros más críticos que el pop, el baile y lo kawaii tienen cabida en el metal; y también les enganchó al mundo del j-pop. No son pocos los que se han declarado fans de Sakura Gakuin y otros grupos tanto de kawaii-metal (Ladybaby, Deadlift Lolita, etc.) como puramente j-pop.
De esta forma, en sus inicios la amplia mayoría de sus fans eran hombres de mediana edad, pues Kobametal siempre ha dirigido el merchandising a este grupo demográfico. Esto conlleva una serie de problemas, sobre todo cuando estamos ante un grupo japonés, paternalismo, sexualización de las integrantes, fetichización de la raza asiática, etc.
No obstante, Sumetal, Moametal y Yuimetal tenían claro que querían que el metal llegara a personas de todas las edades y a mujeres, sobre todo a chicas de su edad, es algo que han repetido en diversas entrevistas. Así que, aunque en un principio el ambiente eminentemente masculino y muchas veces tóxico alejó a muchas chicas del fandom y, por tanto, de la banda (me incluyo), actualmente han llegado gran cantidad de fans, principalmente del j-pop y del k-pop y en su gran mayoría mujeres. Finalmente, su música atrajo también a las personas que se veían alejadas de este género por sus letras, sus fans o la misma escena del metal.
